Nota de versionista: Seguidores sugirieron que la anterior versión se
apartaba de la original, especialmente porque el final de cada estrofa dice
“…mas adelante” [por la fonética parecida] en vez de “de muerte lenta” (por la metáfora de posponer el
sacrificio). Para tratar entonces de mejorar propongo esta nueva pero dejando también la anterior en YT Saludos!
Yo, casi que palmé, pues no me la creí
Juzgando que no hay peligro en la demora,
Vayamos sin apuro a ver el más allá;
A qué forzar la marcha y adelantar la hora
Por lemas que el futuro acaso olvidará?
Obsérvese que cosa amarga, descontenta
Rendir el alma a Dios para saber después
Que era una falsa ruta, que fue una insensatez!
Morir por las ideas, sí, de muerte lenta
Pero de muerte lenta.
Esos predicadores que invocan el martirio
Por otra parte, no se quieren ir de acá:
Morir por las ideas, es el fin y el principio
De la existencia que ellos no se privarán.
Yo he visto tantas veces a esta gente que intenta
ser un Matusalén, por la longevidad,
Que concluyo que deben decirse en soledad:
Morir por las ideas, si... de muerte lenta
Muy bien, de muerte lenta.
De ideas que reclaman que otros se sacrifiquen
Sectas de todo pelo nos traen un carnaval
Por eso, las posibles nuevas víctimas dicen:
Morir por las ideas, muy bien, pero... por cuál?
Y, como todas ellas parecido argumentan
Cuando las ven venir con su declamación
Los sabios se recelan delante del panteón:
Morir por las ideas, si... de muerte lenta
Que sea de muerte lenta.
Acaso si bastaran algunas hecatombes
Para que el mundo cambie y todo así arreglar,
Después de tantas galas de testas que se rompen
El Paraíso en tierra debiera ya reinar.
Pero la edad de oro va para las calendas,
Los dioses tienen sed y siempre quieren más
Y la muerte, la muerte, vuelve siempre a cobrar
Morir por las ideas, si... de muerte lenta
Que sea de muerte lenta.
Ustedes, los mentores, apóstoles del odio
Mueran primero ustedes, los dejamos pasar
Y por favor, no impidan que vivamos nosotros
Es el único lujo que nos podemos dar
Porque al fin, la guadaña vigila siempre atenta
Ella no necesita ninguna invitación
Morir por las ideas, bien, de muerte lenta
Que sea de muerte lenta.